Antologia poética - incluye 2 Disco compacto -- Rojas, Gonzalo
商品コード: 169953
商品コード(SBC): 169953
ISBN13: 7509670000202
サイズ: 14 x 13.5 x 1.2 cm
頁 数: 144 pgs.
重 量: 0.7 kgs
装 丁: hard cover
出版社: U.N.A.M.-Dirección de Literatura
発行年: 2000
発行地: Mexico
双書名: Voz Viva de México, 41
PDFリンク:
※ 詳しくはこちら (PDF追加情報)
- Seleccion de Gonzalo Rojas y Fabienne Bradu, Presentacion de Fabienne Bradu
Descripción:
En esta obra usted podrá escuchar a Gonzalo Rojas. Autor de: ‘La miseria del hombre’, ‘Contra la muerte’, ‘Oscuro’, ‘Transtierro’, ‘Del relámpago’, ‘50 poemas’, ‘Materia de testamento’, ‘Antología de aire’ y ‘Diálogo con Ovidio’. Nos ofrece entre otros: ‘Crecimiento de Rodrigo Tomas’ ‘Oráculo’, ‘Perdí mi juventud’, ‘La salvación’, ‘Carta del suicida’, ‘Las hermosas’, ‘La loba’, ‘Por vallejo’, ‘Cama con espejos’, ‘Pareja humana’ y ‘Transtierro’.
Como antesala para oír la voz del autor ofrecemos en forma impresa una presentación: « La otra voz de Gonzalo Rojas» por parte de Fabienne Bradu.
En la primavera de 1998, Gonzalo Rojas llegó a México para recibir la primera edición del premio de poesía Octavio Paz. En lugar de una llamada de su ‘hermano de horizonte’, recibió la escueta noticia de su muerte, en la noche que se cerró después de un domingo asoleado y apacible como fue el 19 de abril de 1998. Para todos los que estuvimos en la cercanía de Octavio Paz y hoy permanecemos a solas con su obra, la presencia de Gonzalo Rojas, en esos días de duelo y desamparo, fue como la presencia de la poesía: en otra voz, desde la otra voz, hacia la otra voz que acababa de extinguirse. La sola presencia de Gonzalo Rojas nos refrendó una certeza desdibujada por la pérdida de la persona: la poesía no muere con la muerte del poeta; la poesía, de promo calla y reencarna como si tuviera una existencia y una resistencia a roda prueba.
Como los ánimos no estaban para festejos, una sola de las actividades programadas se mantuvo: la lectura pública de Gonzalo Rojas en el Palacio de Bellas Artes. Así lo hubiese deseado Octavio Paz, así nos recubrió la voz ronca de -chileno, como un bálsamo y la evidencia que necesitábamos palpar en esos días; la poesía no se extingue con la envoltura mortal. Allí me sucedió algo que, me imagino, les habrá sucedido a muchos de los oyentes de la poesía de Gonzalo Rojas: esa noche, oyéndolo leer sus poemas, creí entenderlos cabalmente. También tuve la sensación precisa e indescriptible de oír a la poesía hablando, diciéndose a través de ese hombre en mangas de camisa, con los tirantes rojos enmarcando su pecho de pulmonar aliento, los párpados semicaídos sobre unos ojos como ágatas rodando entre la lejanía y la calidez, yel rostro de pronto animado por unas sonrisas que eran como la placidez nacida de una añeja malicia. Esa sensación de la poesía hablando por sí sola, la ruve con cres poetas, entre los varios y a la vez pocos que hasta ahora me ha cocado escuchar:
Octavio Paz, Olga Orozco y Gonzalo Rojas. Los tres, de una manera muy distinta y con efectos disímiles: Octavio Paz leyendo su poesía era como un oráculo anegando de luz y transparencia cada escancia de sus poemas, arrojando belleza y armonía sobre las espesuras del tiempo; en OIga Orozco, oí la voz de la pitonisa arrancando imágenes a las entrañas del misterio; en Gonzalo Rojas, oí correr la sangre de la poesía en las venas de sus versos. Pero, con los tres, persiste para mí esta certeza de que oí, no a unos poetas, sino a la poesía misma diciéndose a través de accidentales encarnaciones que le dan voz y respiración a las palabras. Debo confesar que soy muy sensible a la voz de los poetas......